¿La Educación Cristiana, un fin o un comienzo?
A partir de
la aparición del hombre, la historia ha sido marcada por el conocimiento, pre-
histórico, histórico, moderno, contemporáneo y futurista, si se puede llamar de
una forma el conocimiento que se desea obtener, partiendo desde el momento histórico en que se
sitúan los individuos.
En la
sociedad a partir de los 90, se gestaron grandes cambios, pasamos de la
sociedad de la información, a la sociedad del conocimiento, Manuel Castells, [1]
señalo a esta sociedad, como la que tenía a su alcance la mayor cantidad de
información jamás antes vista, la cual proyectaba una sociedad virtual, global
e informada y desarrollo tecnológico.
De allí, la
población general, cambio su características, se tenía una población informada
y con una amplio conocimiento debido al manejo del internet, la dinámica social se acelero, fue una época de cambio,
donde no solo las tecnologías y su plataformas dieron un vuelco, también los
medios de comunicación se apilaron formando así las redes sociales.
Era de
esperar, con los cambios emergentes en las diferentes dimensiones del saber,
que la educación respondiera a las exigencia por parte del sistema, volviéndose
el apoyo necesario para el desarrollo de
la sociedad, la misma ha desempeñado un rol protagónico en la construcción de
las comunidades humanas, ha sido el instrumento para la
trasmisión de la cultura y el instrumento para la prosecución de la historia
del hombre, permite la enseñanza de los prototipos conductuales, moldeando a
través de la instrucción, la modelación de conocimientos, valores destrezas y
actitudes desde su práctica paradigmática.
La educación
forma individuos para la innovación, y
la adaptación exitosa de los seres a la sociedad. Se busca a través de la
formación e instrucción el desarrollo de un ser crítico, de pensamiento
liberador con compromiso social.
Es la
educación la que provee los diferentes escenarios para la instrucción, de allí su
amplia tipología, la educación altruista, humanista, de valores, cristiana, esta
ultima realza su valor, la educación cristiana es la que contempla la igualdad
entre los hombres, aquellos que pueden acceder a una instrucción formal o no, esta
se presenta como la solución en la verdadera formación de principios para que
el hombre lleve una conciencia de su responsabilidad espiritual ante Dios, y su
responsabilidad moral ante los hombres [2].
Al respecto,
la educación cristiana, según Pazmiño (2002), consiste en el esfuerzo divino-
humano deliberado, sistemático, y continuo de comunicar o apropiarse del
conocimiento, valores, actitudes, habilidades, sensibilidad y el comportamiento
que constituye o son consistentes con la fe cristiana. [3]
En relación
con este autor, se puede mencionar que la Educación Cristiana, es aquella donde
solo la asistencia del Espíritu Santo junto a la capacidad del hombre podrá
brindar a otros una ayuda en el crecimiento del ser integral, ya que su
desarrollo como cristiano, evidenciara el éxito de su práctica educativa.
No obstante,
se busca adaptación de la enseñanza cristiana a los modelamientos estratégicos para
la formación de cristianos activos, dentro de las congregaciones, que trasciendan
a la sociedad. No solo que resuelvan problemas circunstanciales para el aquí y
el ahora, dejando de lado la prosecución de una iglesia que necesita extenderse
en el tiempo y en el espacio, esta debe plantearse con una visión futurista.
Una visión fugaz desde la
historia y para la historia.
Hoy se vive
en una sociedad cambiante, cambios gestados desde hace mas de dos décadas,
Deiros (1997) señala que existía un crecimiento numérico en la iglesia de forma
efervescente, a pasos agigantados y caracterizo la posición de la iglesia, como
un organismo fuera de todo compromiso social, cabe destacar que se plantea
desde la concepción educativa que practico, enseño y aprendió la iglesia para
entonces. [4]
El autor
menciona, que la iglesia se enseño desde lo espiritual, para lo espiritual, se
limitaba la evangelización como la única actividad legitima, más allá de la obra divina, no se enseño a la iglesia a
identificarse institucionalmente en lo social, y/o lo político-económico, esta permanece
al margen de lo trivial y mundano, hasta el punto que algunos abandonaron sus
estudios seculares.
Por otra parte,
se encuentra el celo del evangelio caracterizado en una fuerte conciencia de
respeto a la Biblia, se enseño a predicar su contenido con fidelidad, hasta hoy
es una fuente común de autoridad, reconocida mundialmente, la Escuela Dominical mantiene relevancia, y nace
por la caracterización del Pueblo de Libro, el estudio de la Biblia es
considerado punto neural de la misma. Este celo por la Escritura Sagrada,
permeo la presencia de una educación cristiana sesgada, que deja de lado la
preparación integral, con capacidad de alcance de instituciones sociales. [5]
La misión de
la iglesia tradicional, es cambiar vidas de forma individual y levantar un
emporio eclesiástico, ya que se concibe que la sociedad mejore a medida que crece
el número de personas transformadas por la Palabra de Dios. La enseñanza
Cristiana tradicional centro al individuo por encima de la sociedad,
instruyendo en cada convertido normas éticas cristianas, así pasan de una vieja
vida a una nueva vida, toda estructura política, económica y social queda fuera
de la experiencia religiosa espiritual.
Ahora bien, el
enfoque tradicional de enseñar feligreses para mantenerlos en la iglesia
resguardados del mundo, ha sido efectivo para los años anteriores, hoy es, necesario
trascender a una educación cristiana integral, que abarque los ámbitos de la
sociedad y que logre conquistar las instituciones que se han dejado de lado.
El análisis de
los tiempos, nos lleva a discernir con sabiduría las señales de cambio en la
Educación Cristiana, es necesario que se mire con una visión prospectiva, no
solamente en el hecho esperar el futuro, sino de prepararnos para el futuro. La
intención de la Prospectiva en la Educación Cristiana, es fundamentalmente,
cambiar la estructura de enseñanza, pero manteniendo el mismo fundamento, es la
Biblia quien presenta al Dios de las generaciones, preparando a un pueblo
mediante las profecías, para la venida del Mesías, es ver que Juan el bautista enderezaba
las sendas al Señor. Juan el Bautista, veía en prospectiva.
Ahora bien, se
entiende la prospectiva como la
identificación de un futuro probable y un futuro deseable, que difiere del azar
y que es consecuencia directa de las acciones que se emprenden, en la
prospectiva existen variedad de futuros posibles, que resultan de la
planificación y aplicación de acciones, que generaran las consecuencias
esperadas. Así de esta forma la prospectiva es la habilidad de construir,
edificar y promover un futuro y no de esperar un futuro y de reaccionar ante
el.[6]
Es por ello
que, no solo debe presentar una Visión y Misión, sino que debe estar clara en
el futuro que desea, ya no se puede seguir esperando el afán de cada día, sino
proseguir al blanco. Una verdadera prospectiva educativa, estudia los distintos
escenarios dentro de la sociedad y dentro de las congregaciones, la educación
prospectiva mira concibiendo la trascendencia, transdisciplinariedad y la
interdisciplinariedad de los contenidos prácticos de la Biblia, no excluye la
sociedad, sino que gestiona un cristiano social integral, que vive y se
identifica con las tendencias mundiales, sean tecnológicas, financieras,
políticas, sociales, artísticas, pero que busca el dominio en ellas, el llamado
de la Iglesia es a ser cabeza y no cola.
En general la prospectiva en la Educación
Cristiana, debe evaluar el presente y el ahora, analizar las tendencias mundiales,
haciendo uso del fenómeno de la globalización, adaptar contenidos prácticos
preservando la esencia del cristianismo, abrazar los factores de cambio,
así prever los escenarios que esperamos
alcanzar, con metas claras, y establecer las estrategias y aplicar los
proyectos.
En
conclusión, se requieren de técnicas prospectivas, cabe la reflexión escrita
por Pablo Deiros, hace más de veinte años: ¿Cómo nos preparamos para los
próximos años? ¿Cuáles son las bases más adecuadas para el desarrollo del ministerio?
en este caso ¿Cuales son las plataformas más adecuadas, para el desarrollo del
Ministerio de Educación Cristiana efectiva? Se debe consolidar Una Educación
Cristiana Prospectiva para vivir el futuro desde el presente?
[1] Manuel Castells. La Era de la Información. Vol. I. México Distrito
Federal. Siglo XXI. 2001
[2] Juan Mejías. Metas y propósitos de la Educación Cristiana. 2014
[3] Pazmiño, R. W. (2002). Principios y práctica de la educación
cristiana. Una perspectiva evangélica. Oregon, EUA: Wipf and Stock
Publisher
[5] Ibid., p.75
[6] Silvana Carancio. Prospectiva en Educación. Informe Nº1. Universidad
Academia de humanismo cristiano. 2012